’Industria, Innovación e Infraestructura’, el Objetivo de Desarrollo Sostenible, para el que más fondos no reembolsables se ofreció en 2018
Actualmente se calcula que para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible a 2030 existe un déficit de al menos 2,5 trillones de dólares anuales, según cálculos de la OCDE.
Esto, más que ser un dato interesante, plantea múltiples retos a la financiación de iniciativas que generen impacto social, en donde se espera que el involucramiento del sector privado sea más significativo que el actual.
Se estableció que el ODS de “Industria, Innovación e Infraestructura”, fue el más financiado, con 86M USD, también tuvo gran importancia el ODS de “Trabajo Decente y Crecimiento Económico”, financiado con 78M USD.
Aunado a lo anterior, Innpactia ha encontrado que hay unos ODS que reciben más financiación y otros que carecen de ella, de manera que las diferencias son muy marcadas, haciendo que en la práctica, se financien ciertas temáticas específicas y no la totalidad de la agenda 2030.
El POAD 2019 hace un recuento del panorama general de la oferta y demanda para estos actores del desarrollo, una diferenciación por las convocatorias al emprendimiento y al emprendimiento social, seguido de un análisis de competencia de las convocatorias y las conclusiones que esto arroja, todo con base en la información e interacción que se genera en la plataforma Innpactia entre convocatorias rastreadas de más de 2000 donantes y la interacción de los más de 16.000 usuarios frente a estas.
Cabe resaltar la creciente importancia del emprendimiento social que busca generar externalidades positivas a través de la solución de problemáticas ambientales o sociales, sin dejar de lado la rentabilidad y la sostenibilidad.
Las temáticas de emprendimiento y emprendimiento social han sido abanderadas en los recursos exclusivos para Colombia por los fondos públicos Emprender del SENA e INNpulsa. Estos dos oferentes ofrecieron 16 millones de USD y 8 millones de USD, respectivamente.
El mayor monto ofertado por fondo privado lo ofrece la entidad privada The Global Innovation Fund con 16.2 M USD y seguidamente Nesta con 3.5 M USD. Resulta interesante que estos recursos no son ofertados de manera exclusiva para Colombia sino que se ofertan de manera global, situación totalmente diferente para el comportamiento de los fondos públicos en donde la competencia es
exclusiva entre colombianos.
El mayor competidor del sector privado son las ONG. Si bien los individuos y el sector privado cuentan con una exclusividad conjunta de 81% para el acceso a las oportunidades de emprendimiento, el monto al que acceden las ONG es cinco veces más grande que el de los individuos.
Esto hace pensar que hay una oportunidad en estas convocatorias para las ONG y que la empresa social está creciendo en auge, lo que arroja preguntas interesantes para el ecosistema.
En conclusión, el informe aborda el característico panorama al desarrollo en Colombia haciendo énfasis en el emprendimiento, por la creciente importancia que ha venido adquiriendo en nuestro país, además de la importancia del involucramiento del sector privado en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Se refuta la tesis que le da vida a este proyecto: que no existen recursos disponibles en el ecosistema para financiar a las buenas ideas. Al contrario, abundan las oportunidades, a nivel global y exclusivo para Colombia.
“El panorama general de la financiación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en Colombia es acorde con los datos globales de la financiación de la agenda 2030. Es decir, existen amplias brechas entre ODS que parecen más atractivos para los oferentes, haciendo que algunos queden relegados y que metas de la agenda se vean amenazadas para el 2030. Además, el sector privado tiene un papel cada vez más importante en el logro de los ODS. Por esta razón decidimos analizar el financiamiento a los emprendimientos. En este ámbito nuestra investigación arroja que el emprendimiento está ganando terreno e importancia, de esto se derivan bastantes preguntas, la más esencial de ellas es que sin duda hay recursos para el desarrollo pero la forma en que se están adjudicando dichos recursos está cambiando. En esta coyuntura de cambio en la adjudicación de recursos es que nuestros datos se vuelven indispensables para la toma de decisiones de los actores que buscan financiación al desarrollo” afirma Juan Carlos Lozano, CEO Innpactia.