Madre, ¡Gracias!, una y mil veces, ¡gracias!
Por: Gloria Umbacia
Periodista
Especial para Gestión Solidaria
Madre, ¡Gracias!, una y mil veces, ¡gracias!
Almacenes de ropa, calzado, perfumes y otros artículos femeninos activan el comercio esta semana y, seguramente, los restaurantes estarán abarrotados el domingo. Sin importar el costo de vida siempre habrá un espacio para celebrar a las madres en su día.
¡Sí! este domingo se celebra el día de las madres. Es por decir, un día comercial; porque quien no se ha planteado la idea de que el día de las madres debería ser todos los días del año y que en cualquier momento podríamos sorprenderlas con detalles.
Precisamente, esta semana muchos están haciendo reservas en restaurantes, buscando el mejor regalo y la mejor manera de rendir homenaje a la mujer que nos llevó por nueve meses en su vientre, soportó los dolores del parto y nos dio la vida.
Cada mayo celebramos a las madres, les dedicamos un día del año, un día a la mujer que, sin importar nuestra edad, sigue presente para sostenernos. Por esto, mi reflexión hoy es que un día es insuficiente para agradecer a las madres que nos amaron antes de nacer, nos brindaron su amor y cuidado cuando éramos niños y ahora de adultos, nos acompañan con sus consejos.
Doy gracias a Dios por permitirme la bendición de poder compartir con mi madre, no solo uno, sino muchos días al año, de regalarle alegrías y sorprenderla con mis proyectos, porque no hay nada más gratificante para las madres que la satisfacción de ver el éxito de sus hijos.
A los que ya no tienen la oportunidad de compartir con ese, nuestro primer y más grande amor, les invito a recordarlas con cariño y como homenaje enseñar a sus hijos, si los tienen, las buenas costumbres que sus madres dejaron como legado.
A propósito, se ha preguntado ¿de dónde viene la celebración del día de la madre? Pues como muchas de las tradiciones que nos acompañan la civilización griega tiene mucho que ver, pues en la mitología se rendía culto a la diosa Isis, conocida como “La gran madre”, así mismo a la diosa Rea, “madre de los dioses del Olimpo” y en el imperio romano a la diosa Cibeles, “La diosa madre”.
Sin embargo, y por descendencia católica, los europeos transformaron la celebración de estas diosas en la celebración de la Virgen María, madre de Jesús, así las cosas, el 8 de diciembre de 1954, el Papa Pío IX declaró esta fecha como el día de las madres en honor a la Inmaculada Concepción, día que se celebraba en algunos países de Europa.
La historia relata que solo hasta en 1914, en Estados Unidos el presidente de la época Woodrow Wilson declaro que el día de las madres se celebraría el segundo domingo de mayo como homenaje a la poetisa Julia Ward Howe y a la activista Anna Reeves Jarvin, quienes extendieron una campaña porque se reconociera este día en América. A raíz de esta declaración, en España, se tomó la decisión de que se dejaría separada la celebración de la Inmaculada Concepción y el día de las madres, de manera que desde 1965 trasladan la celebración al primer domingo de mayo, como se celebra actualmente.
Es así como se define la fecha comercial de un día que, en mi opinión, deberíamos celebrar todos los días del año. De manera que a mi madre y a todos las que tienen el privilegio de serlo solo tengo una palabra para decir: ¡Gracias!
Lea también:
El Jaime Duque, Un Lugar Para Celebrar El Día Del Niño
