Confiar celebra sus 50 años con el poder de la juntanza
La meta es hacer del Confiar sujeto, un confiar verbo: Yo confió, tu confías, el confía, nosotros confiamos; rompiendo la territorialidad del slogan para convertirla en una filosofía, una manera de ser y de actuar con otros. Cooperativizar para el Bienvivir.
Por: Luis Sánchez
Asesor de prensa
«Señor, por favor, le puedo recomendar el maletín que dejo en mi silla, voy a tomar unas fotos, es un momentico»…
- -«No se preocupe, aquí solo hay gente de confiar».
Quedé anonadado con la respuesta de quien estaba sentado a mi lado y no conocía; nos unía la misma reunión que compartíamos. Igual, con cierta aprensión, dejé mi maletín bajo su custodia.
Sucedió en el Jardín Botánico “Joaquín Antonio Uribe” de la Ciudad de Medellín, el pasado sábado 16 de julio en la celebración de los 50 años de vida jurídica de Confiar, entidad cooperativa, y en el umbral del Bazar de la Confianza, que se realizaría al día siguiente, domingo 17 de julio, dentro del marco de conmemoración de este aniversario.
Y claro, segundos después, mientras tomaba algunas fotos, relacioné la doble connotación de su respuesta. Me hizo percibir su arraigo a la cooperativa, su profundo sentido de identidad y de pertenencia con la comunidad que nos acompañaba.
Era el sello de la confianza que caracteriza a Confiar, entidad cooperativa. Como bien lo dice Oswaldo León Gómez, líder de la Plataforma Solidaria Confiar, “durante mucho tiempo hemos venido diciendo que la diferencia está en Confiar. Y sí, así es. Porque confiar es creer en uno mismo y en los demás, confiar es ese hilo invisible que se construye a partir del respeto y la transparencia, confiar permite construir relaciones de cooperación, relaciones profundas, solidarias, repletas de esperanza. Porque confiar es un vínculo. En Confiar nos vinculamos a una manera de ver la vida, a un propósito común, ocupamos un lugar transformador.” Y ese pensamiento corporativo se vio reflejado en aquél asociado.
El lenguaje de la confianza
La noche de celebración de los 50 años de historia de Confiar, transcurrió en un ambiente fresco, fraternal, donde las sonrisas , las palabras y los abrazos unieron los corazones de los invitados, dando sentido a la vida, expresando amor y confianza con la convicción de que otro mundo si es posible desde la cooperación.
Fue una fiesta multicolor, multicultural, donde el arte, la danza, la poesía, la música, el respeto, la solidaridad, la diversidad, y en especial los asociados, fueron los actores principales.
No hubo la rigidez de los discursos ni los excesivos actos protocolarios. Fue la noche de la remembranza, con intervenciones para la interacción, la reflexión, y el aprendizaje.
Oswaldo León Gómez, en el relato de su crónica, agradeció a los fundadores, a los asociados, a los consejeros y a todas las personas que han hecho posible la historia de Confiar, y recordó que “la crítica a una sociedad injusta, basada en la explotación y dominación excluyente, era y sigue siendo correcta”.
Bajo la luz de la luna y de los reflectores, en un ambiente musical y de confianza, continúo la festiva celebración. Confiar hizo un reconocimiento especial a los únicos fundadores vivos, Rosendo Arturo Saavedra y Carlos Toro, así como a 20 personas entre asociados, funcionarios directivos y administrativos, con la entrega de una hermosa escultura, que representa los valores de Confiar: solidaridad, unión, respaldo y solidez.
Por otra parte, y como símbolo de gratitud e integración, Fecolfín acompañó a su afiliada. Estuvo presente en la celebración y rindió un homenaje entregando el óleo con la figura del fundador del cooperativismo de ahorro y crédito en el mundo, Federico Guillermo Raiffeisen.
La historia de Confiar empezó hace 50 años, con 33 trabajadores de Sofasa, y a la fecha, dice el líder de la Plataforma Solidaria, “sigue cumpliendo a cabalidad y sin distracción, con el propósito de convertir en realidad el juego infinito de la cooperación, para revelar un mundo nuevo, paso a paso, avanzando de la pequeña Cootrasofasa a este estado de realidad superior que es Confiar, y su Plataforma Solidaria.”
La Plataforma hace referencia al conjunto de acciones, programas y proyectos que adelantan en diversos ámbitos, encaminados a cooperativizar para el Bienvivir, y que le dan integralidad al inventico y al profundo sentido social y humano que caracteriza todo lo que se hace a través de Confiar Cooperativa Financiera, la Fundación Confiar, Sólida vivienda y hábitat solidarios SAS, y el complemento estratégico de entidades aliadas como la Corporación para las microfinanzas solidarias Fomentamos y la
Previsora Social Vivir los Olivos.
“Y llegaron los tambores. La alegría del corazón a los pueblos de colores” y con la brisa fresca de la eterna primavera, la orquesta «La Pascasia» con efusiva fiesta tropical, selló el cierre de la celebración de Confiar, 50 años.
El bazar de la Confianza
El domingo 17 de Julio, el Jardín Botánico era todo de Confiar. Sus puertas se abrieron para recibir a cerca de 22 mil personas, quienes entraron de manera rápida y ordenada, para incursionar en el gran “Bazar de la Confianza”. Cada invitado recibía una de las 22 mil monedas acuñadas de centavo y medio, para participar en las actividades del barrio Confianza, lugar de la oferta de servicios de la Plataforma Solidaria de Confiar.
Fue el punto de encuentro entre asociados y sus familiares, con dirigentes. «El poder de la juntanza solidaria, de lo colectivo puesto al servicio del bien común». Hubo muchas risas para reír, y alegría desbordada para compartir. Una gran fiesta entre libros, poemas, tertulias, música, literatura. Niños, jóvenes, adultos y hasta abuelos disfrutaron de un encuentro cultural, social, recreativo, de aprendizaje, porque con juegos didácticos, enseñaban los valores cooperativos. Todo lo que se pudo ver, vivir y sentir en el Bazar, fue la evidencia de la confianza “en que sí es posible un sistema económico alternativo y real, más justo y en el cual
las personas estén en el centro; “un ejercicio ético y estético, contrario a los escenarios ilusorios y oscuros del capital que persigue, básicamente, la finalidad del lucro”
Se realizaron más de 100 actividades, entre talleres, conversaciones, presentaciones, activaciones, juegos, en nueve espacios temáticos, resultado de procesos de integración y vínculo con la comunidad y el territorio.
En cualquier momento aparecían los Artistas Itinerantes con sus diversas expresiones de música, teatro, danza, comparsas. En el espacio Economías para la paz, se escucharon propuestas de organizaciones de Economía Solidaria, gestionados por excombatientes, surgidas luego de la firma del Acuerdo de Paz.
También presentaron su cerveza artesanal de La Montaña, y con prendas con sugestivos mensajes de paz, presentaron el desfile de moda La PAZarela, organizado por MANIFIESTA.
En El Teatrino se disfrutó de presentaciones musicales y teatrales, como del Grupo Orula, propuesta de cantaoras tradicionales afrodescendientes; Carmen Úsuga, con tangos y boleros, y el Colectivo Teatral Infusión, con una propuesta de máscaras.
El Café Arte fue puro pensamiento y diálogo crítico. Un encuentro de librerías, editoriales independientes y museos, colectivos y organizaciones que realizan procesos formativos y comunicacionales a través de la imagen, la escritura, la lectura y la oralidad. La Ecología de lo Cotidiano fue el escenario de la conciencia del cuidado de “nuestra casa en común”: La Tierra. Los Sabores de Confianza fueron una delicia, por la gastronomía de las diferentes regiones del país, y los conversatorios: saberes negros y paladares blancos, y la cocina del algo. El Mercado solidario ofreció los productos de las organizaciones o expresiones familiares relacionadas con la producción artesanal, agroecológica y campesina. Confiar en la Juventud visibilizó los procesos juveniles con muestras
musicales.
“Hay que insistirle a la gente que finalmente es posible hacer todas estas cosas, si tenemos los ojos limpios para poder ver lo que no está. Y yo creo que esa es una de las condiciones bonitas de Confiar, que tiene los ojos limpios, porque en últimas, es el reflejo de lo que tenemos en el alma, y el compromiso con la cooperación, con la solidaridad y con la intención que no desvanece, independiente de los resultados positivos de Confiar, que es construir otro mundo posible.”
“Porque sabemos que el futuro no hay que esperarlo sino construirlo, hoy tenemosuna mejor cooperativa. Arribamos a este júbilo de los 50 años navegando sobre una
plataforma, timoneada obviamente por la solidaridad. Han sido 50 años de Confianza Viva.” Oswaldo León Gómez. Y así, al caer la noche, cayó también el telón de dos eventos solidarios apoteósicos, donde el poder de la confianza fue el protagonista.